De Primera Mano / La Avenida Madero peatonal
Si en Morelia ya estamos hartos de los daños y las pérdidas que provocan las marchas, plantones, y los políticos prefieren seguir contando los votos antes que beneficiar a la población, bien valdría la pena considerar que de plano y de una vez por todas la Avenida Madero se volviera peatonal
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Morelia, Michoacán, 21 de octubre de 2014.- Desde hace varios años duerme el sueño de los justos en el Congreso del Estado de Michoacán una iniciativa que tiene por objetivo regular las marchas y manifestaciones públicas.
Aunque con esa propuesta se pretende atender un muy grave problema que padecen centenas de miles de michoacanos, pero sobre todo los que habitan o deben transitar por Morelia, lo cierto es que hasta la fecha ha sido superior el interés político de aquellos que se oponen a la regulación que el interés de la gran mayoría de los ciudadanos que nunca participan en todo ese tipo de manifestaciones.
Yo siempre me he pronunciado por la eliminación de leyes, en contra de a sobre-regulación a la que ahora estamos expuestos en gran medida por el afán de lucimiento de senadores y diputados que quieren que sus nombres aparezcan entre los de los creadores de decenas o hasta centenas de leyes y reglamentos inútiles, ambiguos, confusos o en el mejor de los casos, totalmente intrascendentes.
En principio tampoco apoyaría que fuera a través de una ley como se deba regular algo que está muy claro en la Constitución y en los principios generales del Derecho.
Si la autoridad cumpliera simplemente con su función, si vigilara que se cumpla aquél principio que establece que los derechos de los unos terminan donde empiezan los derechos de los demás, entonces nadie estaría pensando en una ley para establecerlo con mayor claridad. De hecho, el incumplimiento de las leyes por parte de las propias autoridades es precisamente otra de las razones por las cuales cada vez hay más reglas y normas, contrario a lo que ocurre en países más avanzados.
Aquí el asunto es que nuestros políticos, antes de tomar decisiones realmente trascendentes para la vida cotidiana de la gente, sopesan el impacto que tendrá a favor o en contra en el número de votos para la siguiente elección. Aquellos que se oponen a regular las marchas esperan recibir buena parte de sus votos de esos grupos corporativos que se sentirían ofendidos con una normatividad en esa materia.
Pero insisto, una ley específica para estos asuntos no sería necesaria con el simple hecho de que la autoridad cumpliera e hiciera cumplir los vigentes preceptos constitucionales.
Ahora bien, si decenas o centenas de miles de habitantes de Morelia ya estamos hartos de los daños y las pérdidas que provocan las marchas, plantones y otras movilizaciones en la capital del estado, y los políticos prefieren seguir contando los votos antes que los beneficios para la población, bien valdría la pena considerar que de plano y de una vez por todas la Avenida Madero se volviera peatonal.
De cualquier manera, ésta, la considerada avenida principal de Morelia se la pasa cerrada prácticamente todo el año, cuando no por maestros, normalistas o antorchistas, la vía es cerrada hasta por la misma autoridad. Por poner un ejemplo muy rápido, el sábado se bloqueó porque se colocarían las nuevas carátulas en una de las torres de la Catedral; el domingo por la tradicional ciclovía; el lunes por la llegada de la Carrera Panamericana; y, el martes por un grupo de ex braceros.
Valdría la pena pensarlo en serio, hacer peatonal toda o gran parte toda la Avenida Madero, ya sea de manera definitiva, o en ciertos horarios, como de las 9:00 de la mañana a las 9:00 de la noche. Así los grupos de manifestantes no obstaculizarían más el paso en esa zona, tal vez hasta perderían en gran parte el incentivo para fastidiar a los morelianos.
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