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De Primera Mano / Michoacán, laboratorio del gobierno federal

Nuestro director, Nicolás Casimiro; periodista con 16 años de trayectoria y con experiencia en radio y diversos medios impresos, electrónicos y agencias informativas
Nuestro director, Nicolás Casimiro; periodista con 16 años de trayectoria y con experiencia en radio y diversos medios impresos, electrónicos y agencias informativas

Sigue dando la impresión de que el gobierno federal sólo está haciendo experimentos con Michoacán, o que en el mejor de los casos tiene buenas intenciones, pero sigue sin encontrarle la cuadratura al círculo para resolver los problemas de la entidad

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Morelia, Michoacán, 27 de enero de 2015.- Una vez más los hechos nos demuestran que Michoacán se ha convertido desde hace poco más de dos años en un inmenso laboratorio para el gobierno federal de Enrique Peña Nieto.

Hace apenas unos días se anunció la remoción de Alfredo Castillo Cervantes como comisionado nacional, pero aún no queda claro qué va a pasar con la Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán que encabezaba.

Lo que en ese momento se anunció fue que el comandante de la 21 Zona Militar, el general Felipe Gurrola Ramírez, se convertiría en el “mando especial” para los temas de seguridad en la entidad.

Ayer, el gobernador Salvador Jara Guerrero aseguraba en reunión de gabinete que concluyó el ciclo de la citada Comisión y que en su lugar operará desde hoy un “Grupo de Coordinación para Michoacán”.

Ayer mismo, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, anunció que Michoacán contará con un coordinador general de las dependencias federales en materia de seguridad y, por otra parte, con un delegado especial de la propia Secretaría de Gobernación encargado de los temas de desarrollo integral.

Por ello sigue dando la impresión de que el gobierno federal sólo está haciendo experimentos con Michoacán, o que en el mejor de los casos tiene buenas intenciones, pero sigue sin encontrarle la cuadratura al círculo para resolver los problemas de la entidad.

Lo anterior se ejemplifica con los polémicos experimentos que en su momento hizo Alfredo Castillo, con la entrada de cientos de funcionarios y policías provenientes del Estado de México; la creación de la Fuerza Ciudadana; la institucionalización de los grupos de autodefensa; la conformación de la Fuerza Rural (donde se infiltraron grupos del crimen organizado) y el reciente anuncio de creación de una Fuerza Indígena Purépecha.

Y a todo ello hay que sumarle que el gobierno federal de Peña Nieto ha pretendido gobernar a todo el país, pero más a los michoacanos, a partir de anuncios y campañas publicitarias. O si no, ¿dónde están los 45 mil 500 millones de pesos que anunció el año pasado? Pues si hubieran sido efectivos una situación muy distinta se viviría ahora en Michoacán.

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