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Se aclara caso del Chevy cristaleado frente a Palacio de Gobierno

El propietario del automotor afectado buscó apoyo de agentes de Policía, sin embargo, no había ninguno de ellos en los alrededores de Palacio de Gobierno
El propietario del automotor afectado buscó apoyo de agentes de Policía, sin embargo, no había ninguno de ellos en los alrededores de Palacio de Gobierno (FOTO: CHARLY MORALES)

Tras las dudas surgidas sobre la posibilidad de que los responsables hayan sido los participantes en la manifestación, así como reportes de testigos oculares, se aclara que fue un ratero quien dañó el vehículo; no se alcanzó a llevar nada, pero huyó

Morelia, Michoacán, 19 de mayo de 2016.- Hace unos minutos se aclaró el caso del Chevy que fue cristaleado esta mañana frente a Palacio de Gobierno.

De acuerdo con presuntos testigos, inicialmente se había manejado que los responsables podrían haber sido participantes en la marcha de la Sección XVIII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y del Frente Cívico Social (FCS).

Sin embargo, ante las dudas surgidas sobre la posibilidad de que los responsables hayan sido los participantes en la manifestación, así como reportes de testigos que estuvieron presentes en el momento de los hechos, ATIEMPO.MX (www.atiempo.mx), su portal de noticias y denuncias por internet, se dio a la tarea de investigar más el caso.

Así, después de una serie de entrevistas, se aclara que el hechor fue un ratero, quien fue visto por el dueño del vehículo, pero alcanzó a huir ante la ausencia de policías en el primer cuadro de la ciudad.

Según manifiestan las personas que presenciaron el suceso –en plena Avenida Madero y a sólo unos pasos de Palacio de Gobierno-, la víctima buscó apoyo de agentes policíacos, pero no había ninguno de ellos en los alrededores, pues presuntamente todos habían sido concentrados para resguardar el Centro de Convenciones y Exposiciones de Morelia.

Cabe hacer mención de que el malhechor no alcanzó a hurtar nada de la unidad, pues fue descubierto en el acto, aunque sí causó la ruptura del cristal y huyó impunemente.

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