Pide Carlos Garfias objetividad en los informes de gobierno municipales
Seamos objetivos: señalemos las fallas, pero propongamos, participemos en el bien común, señaló el arzobispo de Morelia
Morelia, Michoacán, 04 de agosto de 2019.- El arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, pidió objetividad en los informes de gobierno municipales que se realizan en estos días en Michoacán.
En rueda de prensa, expresó lo siguiente: “Seamos objetivos: señalemos las fallas, pero propongamos, participemos en el bien común”.
Carlos Garfias recordó que el informe de gobierno es un instrumento de rendición de cuentas, formalmente establecido en las leyes orgánicas estatales, que obligan a las autoridades municipales a presentarlo anualmente ante la sociedad de su municipio.
“Presentar el informe es la oportunidad de retroalimentación de cómo se están administrando los recursos y para informar las obras y actividades realizadas y reorganizar los recursos, de manera que permitan coordinar las actividades, y controlar y evaluar los resultados, al comparar lo obtenido con lo planificado”, expresó.
Garfias Merlos indicó que el informe es un instrumento de rendición de cuentas que permite perfilar el desarrollo local en el ámbito municipal.
“Los ciudadanos atentos a dichos informes, tenemos libertad de estar de acuerdo o no en sus contenidos, así como en la rendición de cuentas en las distintas administraciones; sin embargo, como cristianos, es importante ser corresponsables y orar para que los políticos amen a su pueblo y le sirvan con humildad”.
El arzobispo de Morelia indicó que: “Como ciudadanos es fundamental cooperar con nuestros gobernantes, ser responsables y poner lo que esté de nuestra parte para que ellos gobiernen bien, participar corresponsablemente en la política. La doctrina social de la Iglesia, expresa que la política es una de las formas más altas de la caridad, porque es servir al bien común”.
“Tristemente tenemos la costumbre sólo de hablar mal, rumorar, criticar, atacar y descalificar a los gobernantes. Nos es difícil observar las acciones positivas, los trabajos y avances en las administraciones. Seamos objetivos: señalemos las fallas, pero propongamos, participemos en el bien común”, abundó.
“Que todos participemos en la vida común de nuestras ciudades y pueblos: los que gobiernan, con el servicio de la humildad y con el amor; los gobernados, con la participación, corresponsabilidad, y sobre todo, con la oración”, concluyó.
