Editoriales

Apoyemos a los Maestros de la Reforma / Horacio Erik Avilés Martínez

Nuestro colaborador de Atiempo.mx, Horacio Erik Avilés, es presidente de Mexicanos Primero en Michoacán; fue director del Polifórum Digital de Morelia y actualmente es presidente del Consejo Ciudadano de Morelia
Nuestro colaborador de Atiempo.mx, Horacio Erik Avilés, es presidente de Mexicanos Primero en Michoacán; fue director del Polifórum Digital de Morelia y actualmente es presidente del Consejo Ciudadano de Morelia

Tengamos muy presente que si dotamos de las mejores condiciones a los maestros michoacanos que mediante concurso de oposición han conseguido el ingreso o ascenso dentro del servicio profesional docente, esto permitirá que la reforma educativa se convierta en ley viviente

Morelia, Michoacán, 13 de junio de 2016.- Indudablemente, en el plano operativo, los profesionistas que obtuvieron la acreditación de idóneos en los procesos evaluativos son quienes encabezan la  implementación de la reforma educativa en las comunidades de aprendizaje de la nación. Ellos confiaron en las renovadas condiciones legales en el ámbito normativo y participaron en un concurso de oposición en el que invirtieron sus recursos y esperanzas. Gracias al desempeño mostrado en el proceso mencionado, lograron acreditar poseer un perfil compatible con el profesiograma preestablecido, conocimientos específicos y pedagógicos, a la par que valores, actitudes y competencias acordes con las necesidades educativas de Michoacán, por lo que lograron obtener una plaza docente, o un ascenso a director, supervisor, jefe de sector o asesor técnico-pedagógico.

A diferencia de los oscuros procesos de ingreso  de antaño, a los maestros idóneos nadie les regaló su lugar en la lista de prelación. Fueron su talento, disciplina y esfuerzo los que les abrieron las puertas de las escuelas estatales y no los privilegios. Ellos, sin que se hubiesen generado las condiciones legales para que en nuestro país existiesen concursos de oposición abiertos para ingresar al servicio profesional docente, jamás por medios legítimos hubiesen podido siquiera aspirar a ejercer su vocación magisterial.

Con este acto meritocrático y emanado de la normatividad vigente, se fracturaron los cimientos del monopolio que mantenía la oligarquía sindical respecto a ingreso y promoción de los docentes en las escuelas públicas mexicanas, a la par que se acotaron los privilegios que poseían los que se sentían dueños de las escuelas normales, quienes brindaban patentes de corso a manera de plazas automáticas a quien se matriculara en los centros de formación inicial mencionados, sin que se garantizasen sus competencias docentes respectivas.

Si bien se han dado pasos importantes en torno a la transformación de las relaciones laborales y la administración del personal en el ámbito educativo, los esfuerzos han sido insuficientes y los resultados insatisfactorios hasta ahora. Los procesos de ingreso y promoción en el servicio profesional docente que se han realizado desde que entraron en vigor las reformas jurídicas, han recibido múltiples quejas en la entidad, por toda clase de violaciones y omisiones que se han perpetrado en detrimento del derecho adquirido mediante examen por parte de centenares de profesionales de la educación.

El proceso inicial, realizado en 2014, fue verdaderamente tortuoso para los aspirantes, de los cuales a muchos se les caducó su idoneidad, otros no recibieron lo estipulado en la convocatoria y a muchos más, en una aún inexplicada e impune maniobra, se les trocó su plaza federal por otra de índole estatal.

En 2015, a pesar de que  se señaló por parte de la autoridad establecida que no se repetirían las mismas situaciones del año anterior, finalmente sucedió prácticamente lo mismo que en 2014, en donde hace una semana vieron fenecer su idoneidad los profesionistas idóneos, con lo que se evaporaron sus aspiraciones de ingresar a la docencia. Más aún, muchos de los que lograron ingresar al servicio profesional docente recibieron toda clase de sucedáneos respecto a la plaza original prometida, siempre inferiores en percepción o número de horas/semana/mes.

Ahora, recientemente se cerró el periodo de inscripción para participar en la convocatoria 2016, por lo que, con los antecedentes de las dos aplicaciones anteriores,  vale la pena preguntarse qué destino les espera a estos profesionales de la educación que desean incorporarse al servicio profesional docente. Si bien,  hasta ahora la autoridad no ha tenido las condiciones necesarias para garantizarles su derecho a todos los profesionales de la educación que aspiran al servicio profesional docente, ello no obsta para que en esta edición se construya un punto de inflexión en cuanto a mejorar la satisfacción y trato digno de los aspirantes a ingresar al servicio profesional docente,  en donde se tenga cuidado de su integridad física, de que se cumpla cabalmente lo estipulado en la convocatoria y se les brinde acompañamiento para que no sean víctimas de violencia y acoso por parte de los grupos sindicales, especialmente de la CNTE, que ha declarado la guerra a los profesionistas idóneos, vejándoles, impidiéndoles la entrada a su centro laboral, desconociéndolos como trabajadores de la educación y emprendiendo por todos los medios a su alcance una campaña de odio en contra de ellos.  El Estado mexicano debe de salvaguardar sus derechos por todos los medios a su alcance, no debe ser permisivo ni omiso ante los flagrantes atropellos de los que han sido víctimas por su mera condición de idóneos.

La CNTE realiza esta vendetta porque ellos constituyen un incentivo testimonial hacia la legalidad, en donde prevalecerá el esfuerzo para que un maestro recorra su trayectoria docente sin necesidad de apelar a la venia de los dueños de los grupos fácticos al interior de la SEE, quienes ven como una amenaza a estos trabajadores honestos, ya que desde el momento en que se conforman las listas de prelación, éstas  constituyen una potencial una enumeración de reserva para que en caso de que los militantes de la CNTE continúen abandonando aulas, los maestro idóneos, una vez agotados los procedimientos administrativos que estipula la Ley Federal del Trabajo,  sustituyan inmediatamente a los faltistas que han olvidado su vocación docente y no tienen respeto por la cultura de la legalidad.

Análogamente, la CNTE sabe que esta lista de prelación para ingresar al servicio profesional docente, serviría para todos aquellos posibles espacios vacantes que generarían quienes continúen despreciando cumplir con la obligación de participar en la evaluación del desempeño profesional docente, por lo que los que buscan evadir tal proceso evaluativo, también contarán con la presión de saber que hay profesionales de la educación con voluntad de trabajar y de ser evaluados, que están dispuestos a realizar un proceso que a ellos les parece tan “punitivo”, pero que es legal. Esto cobra especial importancia, dado que está abierto el periodo de registro para que todos aquellos trabajadores de la educación que por ser víctimas de coerción no pudieron acudir a las dos ediciones anteriores de la evaluación del desempeño docente, puedan desplazarse a la Ciudad de México a aplicar su respectiva prueba.

Es importante que todos aquellos trabajadores de la educación que se encuentran indecisos, quedando bien a medias con la CNTE y transgrediendo la ley, secundando a sus líderes sindicales a costa de sus alumnos, sepan que para educar al pueblo de Michoacán todos los maestros son necesarios, pero nadie es insustituible. Esperemos que a la brevedad se incorporen a la regularidad.

En todo caso, los militantes de la CNTE deben hacer plena conciencia de que sus disensos se deben canalizar y encausar por los mecanismos oficiales, para que la autoridad tenga la obligación de responderles con apego a la normatividad y se pueda dar seguimiento a su derecho de petición y de audiencia, para dirimir todas las controversias ante las autoridades competentes. En todas aquellas causas legítimas, sin duda encontrarán el respaldo popular del que hoy carecen, pero deberán para ello renunciar a la búsqueda insaciable de privilegios y recursos.

Para el proceso 2016, la principal exigencia derivada del análisis de la casuística ya suscitada en los dos procesos concluidos, para que no se repitan del todo en esta edición, es llana pero firme: que se cumpla y se haga cumplir la ley. Que haya respeto irrestricto a la lista de prelación. Que se diga con total claridad cuáles son las plazas vacantes y en qué términos y condiciones habrán de otorgarse. Dado que mediante la opacidad imperante, los trabajadores en servicio han podido hacer uso de las plazas vacantes para permutas, cambios de adscripción e incluso obtener dobles plazas, heredarlas y adquirirlas, hecho que pisotea el derecho de los profesionistas idóneos que se encuentran esperando su turno en la lista de prelación. Es importante ponerle fin a estas irregularidades que suceden en la opacidad. Por lo anterior, un área de oportunidad se localiza en difundir cada una de las plazas que quedan vacantes por jubilación, deceso, renuncia o despido para que de esta manera, se pueda dar seguimiento a lo estipulado en la ley, en donde se señala que todas estas plazas deben ser ocupadas mediante concurso, por lo que deberían de sumarse a las convocatorias respectivas, a la vez que se limitará con ello toda acción ilegal de compraventa de plazas, que quedaría exhibida ante la opinión pública automáticamente.

Resulta especialmente importante que no vuelva a haber anexos en las convocatorias que sean modificables al antojo de la autoridad o de la parte sindical, en los que, como ya ha ocurrido previamente en los procesos 2014 y 2015, el total de plazas a concursar sea cero, con lo que el proceso se convierte en una auténtica burla. Asimismo, resulta perentorio que exista una defensoría de oficio para todos los participantes en el proceso de oposición para ingresar o promoverse en el servicio profesional docente. Desde la sociedad civil, Mexicanos Primero ha alzado la voz en reiteradas ocasiones al respecto y evalúa la posibilidad de intensificar sus acciones en pro de que impere la justicia en los procesos de ingreso y promoción magisteriales.

Asimismo, sería valioso conformar un comité compuesto por ciudadanos y docentes que vigile los procesos evaluativos. Especialmente, estando dentro de las atribuciones del Consejo Estatal de Participación Social en la Educación, bien valdría la pena que conjuntamente con docentes y directivos que hayan participado en procesos previos, se constituya un observatorio de las subsecuentes evaluaciones, para mejorar gradualmente cada etapa y evitar que se repitan los errores, omisiones y actos corruptos del ayer.

Tengamos muy presente que si dotamos de las mejores condiciones a los maestros michoacanos que mediante concurso de oposición han conseguido el ingreso o ascenso dentro del servicio profesional docente, esto permitirá que la reforma educativa se convierta en ley viviente, lo que representará un logro sustantivo en torno a la implementación de la cultura de la legalidad en el sistema educativo estatal y  hacia la efectividad del derecho a aprender de los niños y jóvenes michoacanos. Apoyemos a los maestros de la reforma educativa.

Sus comentarios son bienvenidos en eaviles@mexicanosprimero.org y en Twitter en @Erik_Aviles

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba