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Candidaturas independientes, fraude legislativo / Hugo Gama

Hugo Gama es Maestro en Derecho por la Universidad La Salle México, así como abogado especialista en propiedad industrial
Hugo Gama es Maestro en Derecho por la Universidad La Salle México, así como abogado especialista en propiedad industrial

Los requisitos establecidos por los legisladores locales, literalmente son un fraude a los derechos humanos y a las resoluciones internacionales, fingen cumplir, pero no lo hacen

 

Morelia, Mich., 17 de julio de 2013.- De manera reiterada he señalado que la democracia y el voto es un derecho humano reconocido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, en la Convención Americana sobre Derechos Humanos y en la propia Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, sin embargo, nunca había aunado sobre que el acceso a los cargos de poder o de elección popular es también un derecho de esa naturaleza, identificado como civil o político.

 

El derecho de acceso a los cargos de poder en México, hasta hace poco tenían un candado para que los ciudadanos pudieran disfrutar de ese privilegio, y ello se debía a que la única vía para que el estado fuera garante y que el ciudadano común y corriente lo ejercitará era a través de los partidos políticos, lo que significa elegir alguna de las opciones existentes PRI, PAN, PRD, PVEM, Nueva Alianza, PT, Movimiento Ciudadano.

 

La defensa de las candidaturas independientes que realizaron diversos personajes en México ha rendido sus frutos, a nivel nacional recordamos el caso del ex canciller, Jorge Castañeda Gutman, quien incluso acudió hasta la Corte Interamericana de Derechos Humanos, alegando la inexistencia en el ámbito interno de un recurso sencillo y efectivo para el reclamo de la constitucionalidad de los derechos políticos y el consecuente el impedimento para que se inscribiera su candidatura independiente a la Presidencia de México para las elecciones de 2006.

Dicha demanda se resolvió el 6 de agosto del 2008, en el punto más importante de la resolución la Corte estableció: “227. “ordene al Estado mexicano que adopt[e], en forma prioritaria las reformas legislativas, administrativas y de otro orden que sean necesarias para asegurar que en el futuro exista un recurso para el control de la constitucionalidad de la legislación que afecta los derechos políticos”. Asimismo, observó que “[…] el Estado adoptó una importante reforma constitucional, que la Comisión valora en su justa dimensión. […]” y que dicha reforma ”[…] es un primer y muy importante paso, […] pero no solucionó en forma integral la problemática que afectó a la víctima de este caso […]”. La Comisión concluyó que la efectividad de dicha reforma deberá ser evaluada a partir de la aplicación del nuevo modelo a casos concretos, previa armonización de la legislación inferior con el nuevo precepto constitucional”.

En Michoacán el ampliamente conocido Miguel Guillen Monzón ha sido el impulsor de las candidaturas independientes, personaje quien en diversas ocasiones ha solicitado su registro como candidato a gobernador del estado, sin embargo, su petición siempre fue desechada por el Instituto Electoral de Michoacán, y sus impugnaciones o recursos ante los órganos jurisdiccionales llevaron la misma suerte, ello por no estar establecida la figura de candidaturas independientes en la legislación electoral local.

Las resoluciones internacionales, los criterios jurídicos, la defensa de los derechos humanos y de la democracia, obligaron al Estado Mexicano a legislar en el tema de candidaturas independientes, el estado de Zacatecas ya tuvo la primer prueba resultando electo un candidato de esas características para el municipio de General Enrique Estrada.

Ahora, en el caso de Michoacán parece ser que la reforma que considera esa figura jurídica, resulta ser mera utopía y una burla a la inteligencia colectiva, verán las razones: la reforma establece 2 mega candados para quienes pretendan participar, primero el solicitante deberá dejar en fianza el monto que corresponda al 50% del tope de gasto de campaña para la elección de que se trate; segundo, deberán presentarse firmas de apoyo que representen el 2% del padrón electoral según de la elección de que se trate.

Los requisitos establecidos por los legisladores locales, literalmente son un fraude a los derechos humanos y a las resoluciones internacionales, fingen cumplir, pero no lo hacen. Con los candados constituidos en la reforma recién aprobada, resultaría más atractivo buscar el registro de un nuevo partido político local, con lo cual no tendrían razón de ser las candidaturas independientes.

Miguel Guillen Monzón, probablemente no podrá participar en el 2015 como candidato ciudadano al gobierno del estado, y no por el 2% de las firmas que ocupa, las cuales seguramente obtendría fácilmente gracias al hartazgo de los ciudadanos respecto de los partidos políticos, su dificultad sería recaudar y garantizar la fianza de 19, 514,287.19 (Diecinueve millones quinientos catorce mil doscientos ochenta y siete pesos 19/00 m/n), que resultan ser el 50% del tope de gatos de campaña de la elección del 2011, y que seguramente aumentara para el 2015.

Las candidaturas independientes fueron estructuradas en Michoacán para no ser opción y para ahuyentar a los ciudadanos, además la reforma como se encuentra estructurada violenta el principio de igualdad establecido en la Constitución Federal, los requisitos ponen en clara desventaja a los ciudadanos respecto de los partidos políticos, y ello redunda en que no se garantiza el derecho humano de acceso al poder o a los cargos públicos, por ende seguimos en una democracia y participación ciudadana fallida.

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