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De Primera Mano / ¿Dónde está la estrategia para Michoacán?

Nuestro director, Nicolás Casimiro; periodista con 14 años de trayectoria y con experiencia en radio y diversos medios impresos, electrónicos y agencias informativas
Nuestro director, Nicolás Casimiro; periodista con 14 años de trayectoria y con experiencia en radio y diversos medios impresos, electrónicos y agencias informativas

No soy un especialista en temas de seguridad, pero cada vez entiendo menos la estrategia de seguridad del gobierno federal y cada error que comete beneficia los grupos de la delincuencia organizada que fueron precisamente el origen de todos estos males

Morelia, Michoacán, 14 de enero de 2014.- No es que trate de criticar sistemáticamente, y también reconozco que –como la gran mayoría de los michoacanos-, no soy un especialista en temas de seguridad pública, pero cada vez entiendo menos la estrategia de seguridad del gobierno federal para Michoacán.

En verdad, ante la pasividad de las fuerzas federales del orden en las últimas semanas, al igual que muchas otras personas con quienes platiqué del tema, pensé que la estrategia de seguridad del gobierno federal era similar a la que décadas atrás se utilizó en Colombia, donde secretamente el gobierno financió guerrillas para combatir a los poderosos grupos delincuenciales.

Basta con ver la inacción del Ejército y la Policía Federal desde el año pasado ante la toma de una población tras otra por grupos de autodefensa o presuntas guardias comunitarias. Y no es que critique a las fuerzas del orden, pues entiendo perfectamente que siguen órdenes y si la orden era no intervenir, pues eso fue lo que hicieron.

A muchos también nos pareció sospechoso el accidente de avioneta del coordinador general de las autodefensas, José Manuel Mireles Valverde, y cómo se reveló que la aeronave venía procedente de Guadalajara, mientras que los propios grupos armados hablaban de un corto viaje entre Parácuaro y La Huacana o Tepalcatepec.

También nos sorprendió el interés del gobierno federal por rescatarlo, trasladarlo a Morelia y posteriormente a un hospital privado en la ciudad de México, así como el hecho de que días después haya sido dado de alta, salido en un helicóptero de la Policía Federal y trasladado a un lugar secreto.

Hasta ahí, todo parecía indicar que algún tipo de acuerdo tendría el líder de las autodefensas con la Federación, pero ayer en el lapso de unas horas las cosas cambiaron.

Tras la firma del Acuerdo para el Apoyo Federal a la Seguridad de Michoacán, comenzó el arribo de fuerzas federales, helicópteros y vehículos blindados al estado y tras el llamado del secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, para que las autodefensas dejaran las armas, unas horas más tarde, por la noche, el Ejército Mexicano comenzó el desarme, no sin resistencia, lo que provocó algunos enfrentamientos y entre 2 y 4 muertos, según las distintas versiones.

Mientras eso ocurría en Tierra Caliente, el noticiero estelar de Televisa transmitía un video en el cual Mireles Valverde parece leer un mensaje en el cual aparenta aceptar el llamado del gobierno federal a dejar las armas.

Algo salió mal, pues si la intención era proceder al desarme en la noche del lunes, el anuncio del líder de las autodefensas debió haberse hecho antes del horario estelar de la televisora, o bien, la acción empezar al día siguiente del anuncio.

Tal vez por eso horas después apareció un segundo video donde Mireles Valverde desmiente lo que aparentemente había querido decir antes y en lugar de que el problema parezca resolverse las cosas se complican más.

Yo insisto, no soy experto en temas de seguridad, pero sí aclaro que con cada error que comete el gobierno federal se benefician los grupos de la delincuencia organizada que fueron precisamente el origen de todos estos males.

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