Lo peor de la 72 Legislatura; los nominados son…

Con más pena que gloria se fue la 72 Legislatura del Congreso del Estado. Esos diputados que prometieron ser más claros, más transparentes, más trabajadores y mejores que sus antecesores, resultaron ser peores. Hoy le presentamos las nominaciones a lo peor de lo peor

–

Morelia, Michoacán, 17 de septiembre de 2015.- Con más pena que gloria se fue la 72 Legislatura del Congreso del Estado.

Esos diputados que prometieron ser más claros, más transparentes, más trabajadores y mejores que sus antecesores, resultaron ser peores.

Pero…, aunque hay contadas excepciones que se salvan, ¿quiénes fueron lo peor de lo peor en la Legislatura que por fin terminó?

A reserva de que la lista sea ampliada, a continuación los nominados a “Lo peor de lo peor en la 72 Legislatura”:

LO MÁS DECEPCIONANTE:

• Víctor Silva Tejeda: Después de ser aspirante a la gubernatura de Michoacán en 2011, llegó precedido por mucha fama y bien visto por grandes grupos de militantes priístas que lo veían candidato en la siguiente elección. Fue el primer presidente de la Mesa Directiva en la Legislatura y de inmediato las perredistas Cristina Portillo Ayala y Selene Vázquez Alatorre, así como el petista, Reginaldo Sandoval Flores, le hicieron ver su suerte. ¡Pésimo su desempeño! Tras dejar la Mesa Directiva, optó por emigrar a la Delegación de la Sedesol, ya que en el Congreso del Estado sería sólo un diputado más, pues no presidía comisión alguna.
• Uriel López Paredes: Llegó precedido de una amplia trayectoria como dirigente estatal del PRD, líder estatal del Frente Democrático Cardenista, director de Pensiones Civiles del Estado, diputado local en una ocasión anterior y diputado federal. Quiso ser coordinador de su bancada y no lo logró, así como presidir alguna de las principales comisiones y tampoco lo logró. Terminó viendo cómo desapareció la corriente que encabezaba y convirtiéndose en diputado independiente, diluyéndose así las expectativas que de él se tenían.
• Cristina Portillo Ayala: Calificada como “la mejor diputada en la historia de México” (por ella misma), la ex diputada federal y ex secretaria de la Mujer no pasó inadvertida en la Legislatura, pero terminó más involucrada en la contratación arbitraria de medios de comunicación a su favor, así como en sus intereses políticos y personales.
• Selene Vázquez Alatorre: La por segunda vez diputada local, ex senadora suplente y ex secretaria de Política Social entró fuerte a la 72 Legislatura. Sobre todo los primeros dos años fueron de trabajo muy intenso, pero al final también se distrajo con los temas político-electorales y decidió retirarse para dejar a su hermana Talía Vázquez en la diputación.
• Juan Carlos Orihuela Tello: Al sobrino del ex candidato a gobernador de Michoacán, Ascensión Orihuela Bárcenas, le duró muy poco el gas al llegar al Congreso del Estado rompiendo lanzas y amagando con castigar a los responsables del desfalco en Michoacán. Tras unos meses se tranquilizó y se ocupó de su proyecto político; desde hace mucho quiere ser alcalde de Zitácuaro; compitió, pero perdió.

LO MÁS INCONGRUENTE:

• Cristina Portillo: Que frecuentemente en tribuna y ante los representantes de los medios de comunicación se daba baños de pureza, terminó colocando a su hija para ocupar una de las nuevas plazas laborales creadas en el Congreso del Estado, avalando al mismo tiempo el regalo y la venta de plazas en que incurrieron el resto de sus colegas diputadas y diputados. Algo que había prometido que no permitiría.
• Selene Vázquez: Llegó como diputada plurinominal y renunció a su partido, pero no a la diputación que obtuvo a través del PRD. Después solicitó licencia para buscar la candidatura del PT a la gubernatura de Michoacán y su hermana, como diputada suplente, se asumió también como independiente. Llamaba la atención que no regresaba después de no obtener la candidatura que buscaba, pero después su hermana le pagó el favor al impulsarla, como presidenta de la Comisión de Justicia, para que fuera nombrada presidenta de la nueva Comisión Ejecutiva para la Atención a Víctimas en Michoacán. Una buena chamba, y bien pagada, para los próximos años.

LO MÁS CÍNICO:

• Omar Noé Bernardino Vargas: Emanado del PRI, el ex dirigente estatal del FJR solicitó licencia para buscar la diputación federal por Apatzingán. Ganó su elección y regresó a cobrar casi dos meses más como diputado local.
• Salomón Fernando Rosales Reyes: También emanado del PRI, el ex presidente de la Comisión de Educación solicitó licencia para contender por la diputación federal de Lázaro Cárdenas. Igual que el antes mencionado ganó la elección, pero regresó a cobrar dos meses más en la diputación local.
• Erik Juárez Blanquet: Emanado del PRD, el ex alcalde de Angamacutiro hizo lo mismo que los dos anteriores, solicitó licencia para competir por la diputación federal de Puruándiro, y tras ganar la elección regresó a cobrar dos meses más.
• Elías Ibarra Torres: También emanado del sol azteca, se fue a competir por la alcaldía de Huetamo y ganó. Después regresó al Congreso del Estado, pero sólo como tres días, antes de solicitar licencia nuevamente.
• Sarbelio Molina Vélez: Llegó a la diputación por la vía plurinominal, gracias a la alianza que su partido, Nueva Alianza, hizo con el PAN y con Luisa María Calderón Hinojosa en 2011. Nunca hizo equipo con la bancada panista en los temas legislativos, y, por el contrario, muchas veces se vio más priísta que los priístas, al grado que en la pasada elección de gobernador traicionó a su partido; se fue a apoyar al candidato del PRI, Chon Orihuela (a quien le ofreció 70 mil votos), mientras su partido apoyaba al abanderado del PRD, Silvano Aureoles Conejo. Todavía se asume como neoaliancista. ¿Será?

LOS MÁS APLAUDIDORES:

• Olivio López Mújica: El priísta fue uno de los principales aplaudidores (tal vez el principal) de la 72 Legislatura. Comenzó aplaudiendo todo lo que hacía y decía el gobernador Fausto Vallejo Figueroa; después aplaudió con sumo empeño al comisionado nacional, Alfredo Castillo Cervantes; al gobernador sustituto Salvador Jara Guerrero; y, al candidato del PRI y del PVEM a la alcaldía de Morelia, Jaime Darío Oseguera Méndez. Además, hasta la fecha no se cansa de aplaudir al presidente de México, Enrique Peña Nieto.
• Marco Polo Aguirre Chávez: También priísta, es el mismo caso del anterior.
• Daniela de los Santos Torres: También priísta, es el mismo caso de los anteriores.
• Omar Noé Bernardino Vargas: También priísta, es el mismo caso de los anteriores.
• Marco Trejo Pureco: También del PRI, es un caso similar a los previamente mencionados, pero en menor grado.
• Sarbelio Molina: Como dije antes, por momentos se vio más priísta que los priístas. Muy poca crítica y autocrítica de su parte a lo largo de la Legislatura.

LOS MÁS PROTAGÓNICOS:

• Cristina Portillo: La perredista se mostró ansiosa por seguir a las cámaras, los micrófonos y las grabadoras más que nadie en el Congreso del Estado.
• Selene Vázquez: Muy parecida a la anteriormente citada, aunque con un poco más de sustancia en sus intervenciones.
• Talía Vázquez Alatorre: Hermana de la anterior, estuvo los últimos meses como diputada en sustitución de Selene. No fue sorpresivo su afán por figurar. Así ha sido desde hace años, tenga o no tenga cargo.
• Sarbelio Molina: El neoaliancista se sentía soñado como presidente de la Mesa Directiva. En varias ocasiones hizo enviar a los medios de comunicación boletines de prensa de temas, asuntos y opiniones totalmente irrelevantes.
• Fidel Calderón Torreblanca: Aquél que fuera coordinador del PRD en el Congreso del Estado y presidente de la Mesa Directiva, mientras tuvo aspiraciones de buscar la gubernatura trató de ser muy mediático, lo logró a medias, pero en temas legislativos pasó de noche.
• Marco Trejo: El priísta fue otro de esos que saturaban los correos electrónicos de los medios de comunicación con boletines de temas irrelevantes.

LOS MEJORES CHAPULINES:

• Marco Polo Aguirre: Gracias a su buena relación con el comisionado Alfredo Castillo logró ostentar al mismo tiempo la diputación local y la dirigencia estatal del PRI, a las cuales renunció para buscar una diputación federal por Morelia Poniente, a la que finalmente llegó.
• Alfonso Martínez Alcázar: Después de ser coordinador del PAN, y mientras era presidente de la Mesa Directiva, renunció a su partido, buscó la alcaldía de Morelia por la vía independiente y ganó.
• Daniela de los Santos Torres: Pese a su escaso trabajo legislativo, pero también gracias a la buena relación con Alfredo Castillo y Chon Orihuela, la priísta logró ser postulada por el PVEM y convertirse en diputada federal por Morelia Oriente.
• Omar Noé Bernardino: Otro que sin trabajar prácticamente nada en materia legislativa, llegó a la diputación federal por Apatzingán.
• César Chávez Garibay: De lo peor como diputado en temas legislativos, de fiscalización y de gestión, el priísta brincó a ser presidente municipal de Apatzingán.
• Selene Vázquez: Brincó del PRD a ser diputada independiente; después a ser precandidata del PT a la gubernatura y finalmente a convertirse en presidenta de la Comisión Ejecutiva para la Atención a Víctimas.
• Erik Juárez Blanquet: Con poco trabajo legislativo, el perredista hoy es diputado federal por Puruándiro.
• Salomón Fernando Rosales: Con regular trabajo legislativo, sin ser tampoco de lo más destacado, el priísta hoy es diputado federal por Lázaro Cárdenas.
• Elías Ibarra: De los pocos que destacaron en la Legislatura por su desempeño legislativo, en fiscalización y en gestión, hoy el perredista es alcalde de Huetamo.

LOS MÁS INTRASCENDENTES:

Una categoría mucho más competida que las anteriores, tal vez ni siquiera conozca algunos de los nombres que le voy a mencionar.

• Salvador Galván Infante: El coordinador del PRI durante los 3 años, 7 meses y 15 días que duró la 72 Legislatura no alcanzó a pintar; no hizo ni siquiera un papel gris, más bien transparente. Cedió muchos espacios al PRD y al PAN en comisiones y fue el responsable de que gran parte de la bancada priísta haya pasado inadvertida.
• Jorge Moreno Martínez: Del PAN, tuvo un paso gris por la Legislatura, pese a ser el presidente del Comité de Comunicación Social; Cristina Portillo y el coordinador de Comunicación Social le comieron todo el mandado. Lo dejaron con migajas y aun así se fue contento.
• María Eugenia Méndez Dávalos: Del PAN, prácticamente no hizo nada en materia legislativa, sólo en gestión en su distrito se le vio un poco más y ni siquiera eso le alcanzó para ganar la diputación federal que buscó.
• Gabriela Ceballos Hernández: La panista empezó bien al lograr aprobar el Parlamento Juvenil de Michoacán. De ahí en adelante se echó a la hamaca y terminó siendo una de las más faltistas y de quienes con frecuencia iban a la sesiones a pasar lista y se retiraban.
• César Morales Gaytán: Del PVEM, pasó completamente de noche por la 72 Legislatura.
• Daniela de los Santos: Del PRI, con escaso trabajo legislativo y muy ocupada más bien en hacer relaciones públicas para brincar a la diputación federal que finalmente obtuvo.
• Marco Polo Aguirre: También priísta, con una casi nula intervención en temas legislativos. Su paso por la 72 Legislatura se puede describir en no más de cuatro o cinco líneas.
• Omar Noé Bernardino: Otro del tricolor que también pasó de noche en los temas legislativos. Me sorprende que aún con su mal desempeño sienta que hizo mucho.
• Miguel Amezcua Manzo: Es otro del PRI a quien le reconozco su empeño, aunque finalmente no le alcanzó para trascender.
• César Chávez Garibay: Tan intrascendente que casi se me olvidaba. Aun así se fue a las campañas y hoy es presidente municipal de Apatzingán.
• Armando Hurtado Arévalo: Gris como él sólo. Como político, estadista, parlamentario y legislador, el también ex alcalde de Huaniqueo, ex dirigente estatal del PRD y ex líder de la bancada perredista es “una buena persona”, en el peor de los sentidos.

COMENTARIOS Y SUGERENCIAS: www.atiempo.mx / atiempomx@gmail.com