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Los suspirantes… Presidenciables del PRI

No resultan descabelladas las teorías que interpretan la agudización de los conflictos internos en el blanquiazul y en el sol azteca como parte de la estrategia de infiltración priísta para desgastar y debilitar a los enemigos potenciales
No resultan descabelladas las teorías que interpretan la agudización de los conflictos internos en el blanquiazul y en el sol azteca como parte de la estrategia de infiltración priísta para desgastar y debilitar a los enemigos potenciales

Hasta ahora, independientemente de quién resulte a la postre el próximo candidato presidencial del PRI, lo cierto es que el tricolor aparece como el partido político más sólido para los comicios de 2018, aún con el gran desgaste que viene arrastrando el gobierno de Peña Nieto

Morelia, Michoacán, 13 de enero de 2016.- Con la captura de Joaquín “El Chapo” Guzmán la semana pasada la principal beneficiada no fue la justicia, tampoco las instituciones, ni los mexicanos en general, sino la aspiración presidencial del actual secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.

Si el momento de la detención del líder criminal fue una estrategia política o no, ya nos daremos una idea en unos meses más, sobre todo si el oriundo de Sinaloa vuelve a escapar una vez pasadas las elecciones de este año, como pasó en 2015.

Por lo pronto, como ya dijo alguien antes, a Miguel Ángel Osorio le volvió al rostro el color electoral, lo que en las filas del PRI sigue sin ocurrir con el secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso, y menos con los precios del dólar y del barril de petróleo. Eso sí, sus malos números también resultan beneficiados con la cortina de humo generada por la captura de “El Chapo”.

Los otros hasta ahora firmes aspirantes a la candidatura del PRI son el secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño Mayer, considerado el alfil del presidente Enrique Peña Nieto, y, por supuesto, el dirigente nacional, Manlio Fabio Beltrones, cuyas estrategias le siguen dando resultados.

Contrario a lo que está ocurriendo al interior de otras fuerzas políticas, como el PAN y el PRD, en el tricolor todo indica hasta ahora que si se mantienen las formas, los aspirantes presidenciales podrán hacerse pedazos hacia adentro, pero no lo harán públicamente.

No resultan descabelladas las teorías que interpretan la agudización de los conflictos internos en el blanquiazul y en el sol azteca como parte de la estrategia de infiltración priísta para desgastar y debilitar a los enemigos potenciales desde ahora.

Hasta ahora, independientemente de quién resulte a la postre el próximo candidato presidencial del PRI, ya sea Miguel Ángel OsorioLuis VidegarayAurelio Nuño o Manlio Fabio Beltrones, lo cierto es que el tricolor aparece como el partido político más sólido para los comicios de 2018, aún con el gran desgaste que viene arrastrando el gobierno de Peña Nieto.

De los cambios que se presenten en lo sucesivo, ya hablaremos en su momento.

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