Los suspirantes… Todos… ¿contra Silvano?
Algo que ha resultado evidente a partir del primer debate entre los candidatos a la gubernatura de Michoacán es que los ataques de casi todos, dirigentes y voceros de los diferentes aspirantes a gobernar el Solio de Ocampo, se han centrado en sólo uno de ellos
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Morelia, Michoacán, 11 de mayo de 2015.- Independientemente del resultado del primer debate entre los candidatos a la gubernatura de Michoacán, algo que ha resultado evidente a partir de esa fecha es que los ataques de casi todos, dirigentes y voceros de los diferentes aspirantes a gobernar el Solio de Ocampo, se han centrado en sólo uno de ellos.
Silvano Aureoles Conejo, candidato común del PRD, del PT, de Nueva Alianza y el Partido Encuentro Social ha sido en las últimas dos semanas el blanco de los ataques de Ascensión Orihuela Bárcenas, del PRI y del PVEM; de Luisa María Calderón Hinojosa, del PAN; de Manuel Antúnez Oviedo, de Movimiento Ciudadano; y, de María de la Luz Núñez Ramos, del Morena.
A la fecha, el único que se ha mantenido al margen de los señalamientos contra el diputado federal con licencia es el abanderado del Partido Humanista (PH), Gerardo Dueñas Bedolla. De hecho, tengo serias dudas acerca de si éste último está o no haciendo campaña.
La mayoría de la gente que presenció el debate consideró como ganadora a la panista Cocoa, pero no hubo claridad acerca de quién pudiera haber perdido, lo cierto es que independientemente de que parece haber salido airosa de ese encuentro, la senadora con licencia manda señales que indican que ello no fue suficiente para alcanzar la punta en esta contienda. Y, apoyada por su jefe estatal, Miguel Ángel Chávez Zavala, envía feroces ataques contra Silvano,independientemente de que tengan sustento o no.
Por su parte, Chon Orihuela se ha mantenido en su estrategia de criticar a los gobiernos del PRD y del PAN por el desastre que dejaron en Michoacán, pero omite en todo momento hablar del gobierno del PRI, con Fausto Vallejo Figueroa, Jesús Reyna García y Salvador Jara Guerrero. Por el contrario, presume los “logros” del gobierno del gobierno federal de Enrique Peña Nieto. Además, a través de su dirigente estatal, Agustín Trujillo Íñiguez, también mantiene una encarnizada estrategia de descalificaciones contra Silvano.
En el mismo tenor, pero con menos reflectores, han continuado sus campañas los candidatos de Movimiento Ciudadano, Manuel Antúnez, y del Morena, María de la Luz Núñez, cuestionando a los tres partidos “tradicionales” o a “la mafia del poder”, respectivamente, pero centrando más sus ataques contra Aureoles Conejo.
Ya lo hemos visto muchas veces en procesos electorales anteriores, cuando en las campañas políticas todos los ataques se centran sobre el mismo actor, esto resulta un indicador más confiable aún que las propias encuestas.
Como indica la lógica, Silvano ha esquivado la mayoría de los señalamientos y en general ha procurado mantenerse al margen de las confrontaciones, dejando esa tarea a voceros como el dirigente estatal del PRD, Carlos Torres Piña; el delegado nacional perredista, Jesús Zambrano Grijalva; y, el secretario de Operación Política del CEN del sol azteca, Martín García Avilés.
Aquí la pregunta es, ¿serán lo suficientemente eficaces para contrarrestar la andanada de señalamientos contra su candidato?
Lo digo porque hasta ahora aquellos interesados en enrarecer el ambiente político lo están logrando. Al final de cuentas, nos guste o no, a la mayoría de la gente le llaman más la atención los escándalos y la guerra sucia que las propuestas.
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