Los suspirantes… y los cambios de bandera

En Michoacán tenemos a una serie de políticos que por distintos motivos abandonaron los barcos en que se encontraban y ahora buscarán nuevos derroteros, o bien, en algunos casos, negociar su triunfal regreso a aquellas fuerzas políticas que los vieron nacer

Morelia, Michoacán, 16 de octubre de 2014.- En la política son muy comunes los cambios de bandera; para muchos políticos es más fácil cambiar sus afinidades,  su partido o su ideología política –dependiendo de las circunstancias-, que de equipo de fútbol.

Así, en Michoacán tenemos a una serie de políticos que por distintos motivos abandonaron los barcos en que se encontraban y ahora buscarán nuevos derroteros, o bien, en algunos casos, negociar su triunfal regreso a aquellas fuerzas políticas que los vieron nacer.

Por ejemplo, tenemos a la aguerrida diputada Selene Vázquez Alatorre, quien dejó al PRD, primero de manera provisional, en tanto salía Víctor Manuel Báez Ceja de la dirigencia estatal, pero últimamente esto ya parece ser definitivo, pues se sigue anunciando y conduciendo como diputada independiente.

Selene Vázquez ha buscado el respaldo de Movimiento Ciudadano y del PT para ser candidata a la gubernatura de Michoacán y no ha sido mal vista, pero fuentes de su ex partido dicen que se está negociando su posible regreso a las filas perredistas, lo que muy probablemente haría si le aseguran una diputación federal por la vía plurinominal.

Otro reciente cambio de bandera es el del ex dirigente estatal del PRD y ex líder de la corriente interna perredista, Frente Democrático Cardenista (FDC), Uriel López Paredes, quien argumentó tener diferencias irreconciliables con aquellos que conducían al partido.

Lo que me parece es que después de la escisión del FDC, encabezada por el ahora dirigente estatal, Carlos Torres Piña, que ahora también encabeza Alternativa Democrática Nacional (ADN), a Uriel López le quedó muy poca gente, echando así por la borda su interés por contender por la gubernatura y hasta por posiciones al interior de su partido, después de que en algún momento (no hace mucho) encabezó la expresión con mayor cantidad de consejeros estatales.

El ex diputado federal y por segunda vez diputado local podría estar midiendo tiempos y opciones para lanzarse a una candidatura independiente, pero también hay voces al interior del PRD que hablan de negociaciones para su regreso, y como es hábil para ello, no descarte usted que de regresar lo haga por la puerta grande.

Ernesto Núñez Aguilar, es militante del PRI hasta la médula, pero lo he comentado muchas veces, es diputado federal por el PVEM. Tenía la muy firme convicción de ser candidato de ambos partidos a la alcaldía de Morelia. Ahora sólo está esperando a ver si se le vuelven a dar las condiciones y si el electorado y la clase política olvidan un poco aquella denuncia que se le hizo por presuntamente cobrar “moches” a cambio de la gestión de recursos federales.

Hablando del PRI, hay aquellos a los que se les tacha de haber cambiado bandera en la vida interna del tricolor, se trata de los antes considerados faustistas “a carta cabal”, Marco Polo Aguirre Chávez y Daniela de los Santos Torres, ambos diputados locales y el primero de ellos además dirigente estatal, así como del diputado federal Eligio Cuitláhuac González Farías, de estos, tres se dice que ahora son del nuevo grupo que por debajo del agua encabezan el comisionado nacional, Alfredo Castillo Cervantes, y el secretario de Seguridad Pública, Alfredo Castellanos Becerra.

Por otro lado, en el caso del PAN vemos a un regidor como Miguel Ángel Villegas Soto, de nacimiento y militancia perredista, que llegó al cargo que hoy ocupa como parte de la alianza de facto que grupos del PRD hicieron con el ex senador Marko Cortés Mendoza en la elección por el Ayuntamiento de Morelia.

Aunque muy definido con su ideología de izquierda, Villegas Soto podría verse beneficiado si Marko Cortés sale bien librado de las negociaciones internas en Acción Nacional, lo que podría permitirle colarse a una candidatura por una diputación local, o bien, a un cargo en la siguiente administración del Ayuntamiento de Morelia.

Ya para cerrar por hoy, también vale mencionar tres casos más, el de la ex dirigente estatal del PRD, Fabiola Alanís Sámano, que tras varios intentos frustrados por hacerse con un cargo de elección popular, optó por abandonar el barco para irse al naciente Morena, de Andrés Manuel López Obrador, donde pensó que por su trayectoria podría imponer criterios y decisiones.

La jugada no le salió y hoy la vemos de regreso en el sol azteca, pero ya no con su propio grupo o con el Moduc de Leonel Godoy Rangel, sino organizando eventos para el hoy presidente de la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles Conejo. Fabiola sabe que si juega bien sus cartas, y con las nuevas reglas electorales sobre equidad de género, tiene muchas posibilidades de ser candidata otra vez.

Los otros dos casos son los siguientes: el del ex dirigente estatal del PT y Convergencia, Aníbal Guerra Calderón, quien ahora aparece como militante perredista, aún no sé que busca, pero seguro que no está sólo para reforzar el proyecto; y, el del ex regidor panista de Morelia, Jacinto Durán Magaña, fiel seguidor de Marko Cortés por muchos años, y a quien ahora vemos trabajando muy de cerca con el equipo del senador del PAN, Salvador Vega Casillas.

Eso es todo por hoy, muchas gracias y hasta pronto.

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