Editoriales

Proyecto Secreto: Año nuevo en la ola de males

Es la gran oportunidad para que los mexicanos despierten, enfrenten los problemas, los fracasos y construyan la grandeza y la paz

Morelia, Michoacán, 30 de diciembre de 2019.- Es la descomposición social, no hay valores. Sino contradicciones: se condenan los conservadores de enfrente y se protege a un gran conservador y criminal, Barlett.

El Senado del país más poderoso de la tierra da la espalda a la justicia, a la verdad. Renuncia a su misión y visión, desconoce sus juramentos y se consagra todos a defender a alguien que pisoteo el derecho y la ley, Donald Trump.

Frente al Año Nuevo y el terrible enigma del tiempo que viene, como un ciclón de sombras, más grande que el ser humano, terrible, implacable.

Pasamos un año de errores, fracasos, caída en la producción, seguridad y tantos rubros.

Seguimos en un torbellino ciego y conducidos al caos por la autoridad ciega necia, enajenada, empecinada en sus proyectos mal hechos, incapaz de tomar en serio la situación y de hacerle frente a los problemas para enderezar el rumbo.

“El pueblo bueno”, tan bueno tan bueno que hasta se pasa sigue inmaduro, desactivado, en una actitud infantil, tampoco hace frente al problema y se adormece con regalitos, esperando todo de papá gobierno.

Los poderosos se preocupan de la macro economía y descuidan a los pobres, los montes están devastados, lo mismo que los campos exhaustos y envenenados por los químicos.

Los legisladores siguiendo a poderes ocultos hacen leyes para minorías ínfimas que atentan contra la naturaleza: homosexuales, abortistas, madres asesinas de sus hijos en gestación.

Un entorno mundial de sed de los bienes materiales, una producción y comercio sin rostro humano, sin verdad ni justicia, un consumismo feroz, inducido, inútil.

Ante la incertidumbre del paso del tiempo es de suma importancia es el límite es muy rápida hacer producir la tierra y ofrecer los bienes para todos los hombres.

La vida del hombre no está a merced de las fuerzas sociales o del impulso ciego del destino, el hombre está puesto para conducir la historia y crear el progreso para el bienestar de todos.

Somos responsables de la marcha de la historia, urge despertar, “ponerse las pilas” y asumir la tarea grandiosa y vital de conducir la historia. No podemos seguir inconscientes, agachados, irresponsables como tripulantes y pasajeros de un avión sin control o como rebaño de mansas ovejas que conduce un dictador al matadero.

Urge despertar la conciencia de todos los mexicanos, los más postrados, ignorantes, indefensos. Urge liberar su grandeza y su enorme capacidad de transformación, verdadera transformación y no sólo palabra populista.

Hay que desenterrar y cultivar su fe para buscar la única alianza ignorada por un presidente que quiere usar al Papa y manipular a Dios en su enajenación que lo lleva a sentirse único y destinado a cambiar el mundo.

Hay que ir en alianza con el gran Poder del Señor de la historia, que es siempre bondadoso y fiel al hombre y busca su grandeza y bienestar, totalmente vuelto al hombre y sus necesidades y su verdadera grandeza.

El año que comienza será de triunfo, no sin pasar por pasajes de lucha, sacrificios, búsqueda de las soluciones sensatas y eficaces. Será de bienestar y progreso para todos si adoptamos los regalos del Rey recién nacido en Belén: la justicia y el derecho, la verdad. Será de paz sin violencia ni sangre derramada, sin angustias por el empleo y el pan de cada día.

Podemos enunciar, así, un año de abundancia de bienes, la seguridad y la paz.

¡FELIZ AÑO NUEVO! 

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba