Pide Iglesia cerrar el paso al voto corporativo y «obligado»

«La alternancia política es positiva, pero no basta para resolver situaciones urgentes»; Michoacán ocupa gobernantes libres de nepotismo, tráfico de influencias, que sean honestos, justos y que cumplan con su función de servir, dicen en un mensaje el Cardenal Suárez Inda, los cuatro obispos y los 3 obispos auxiliares del Estado

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Morelia, Michoacán, 23 de mayo de 2015.- A 16 días de que se celebre la jornada comicial en la entidad, la máxima jerarquía católica en Michoacán encabezada por el cardenal Alberto Suárez Inda, obispos y obispos auxiliares del Estado, hicieron un llamado a votar libremente el 7 de junio; y a cerrarle el paso al voto corporativo, obligado o presionado por partidos «u otros grupos de poder». Pidieron asimismo a los ciudadanos ser más críticos y «no entregar un cheque en blanco» a los candidatos.

En una extensa carta, los líderes católico pidieron a las autoridades cumplir con su responsabilidad frente a este proceso electoral y sancionar conductas intimidatorias que obliguen a los electores a sufragar a favor de determinado partido, como sucedió hace cuatro años.

En tanto que a los candidatos a los distintos cargos de elección popular que toman parte en este proceso, los convocaron a respetar los resultados oficiales de la elección que emitirá el INE, y «si los partidos políticos tienen argumentos para impugnar lo hagan por la vía legal y sin acudir a la violencia verbal o física. Bastante hemos sufrido con esta situación tan prolongada de crímenes y venganzas por parte de grupos delincuenciales, como para tolerar que la justa electoral sea ocasión de aumento de esta violencia tan generalizada».

Asimismo, exhortaron a la ciudadanía reflexionar a conciencia su voto y no dejarse llevar sólo por lo que dictan los medios de comunicación y/o las redes sociales, «hay que escuchar al pueblo en la persona del taxista, el bolero, la empleada de la tortillería o de la estética».

El documento fue firmado por el Cardenal y Arzobispo de Morelia, monseñor Alberto Suárez Inda; asi como por los obispos de Zamora, Javier Navarro Rodríguez; de Apatzingán, Cristóbal Ascencio García; de Lázaro Cárdenas, Armando Antonio Ortiz Aguirre; de Tacámbaro, Gerardo Díaz Vázquez; y los obispos auxiliares, de Morelia, Juan Espinoza Jiménez y Carlos Suárez Cázares; y de Zamora, Jaime Calderón Calderón

Bajo la leyenda «No perdamos la voz, votemos y reconstruyamos nuestro Estado», los obispos de la Provincia Eclesiástica de Morelia emitieron su mensaje con ocasión de las elecciones del 7 de junio, convencidos de que como obispos y creyentes, «tenemos la firme convicción de que es deber nuestro acompañar e impulsar, desde nuestra misión de pastores, el proceso democrático del país, superando el ambiente sofocante de desconfianza en las instituciones, proclamando los valores de una genuina democracia pluralista, justa y participativa, animando al pueblo hacia un real protagonismo”.

Los prelados michoacanos afirmaron que la participación ciudadana no debe reducirse al momento de emitir un voto; «antes y después de su emisión tenemos que hablar y actuar como ciudadanos responsables del destino de nuestro Estado y de nuestra nación».

Reconocieron asimismo que, «por experiencia sabemos que las autoridades solas no pueden resolver todas las situaciones contrarias al progreso integral, solidario y armónico de nuestro Estado; menos aún si estas mismas entran en complicidades vergonzosas y destructivas con personas o grupos que infringen impunemente las leyes, creando caos, inseguridad y desconcierto».

Voto personal, libre, secreto y singular

Las autoridades eclesiásticas pidieron no firmar un cheque en blanco a favor de los candidatos, permitiéndoles actuar sin más límites que sus propios intereses y gustos; «sobre ellos está la ley, pues, como representantes del pueblo, son mandatarios» y ostentan una autoridad de acuerdo con los mandatos del mismo pueblo elector.

Afirmaron que los ciudadanos debemos dar seguimiento a las autoridades electas, para que cumplan y hagan cumplir las leyes, como prometen al asumir un cargo como servidores públicos.

Monseñor Suárez Inda y sus obispos resaltaron en su misiva que el voto debe ser personal, libre, secreto y singular; «no debe haber votos corporativos, ni más de un voto por elector. Colaborar directa o indirectamente con el fraude electoral es una acción que vulnera gravemente los derechos humanos». Con el sufragio, se coopera responsablemente a definir el rumbo del Estado «hacia la verdadera democracia y justicia».

Refirieron asimismo que les consta cómo en las elecciones de hace cuatro años «en algunos de nuestros municipios hubo presión por parte de partidos u otros grupos de poder, para obligar a los electores a sufragar a favor de determinado candidato. Esperamos que las autoridades correspondientes intervengan oportunamente para evitar y/o sancionar este tipo de conductas intimidatorias».

«Los mexicanos hemos constatado que la alternancia de partidos en el ejercicio del poder ha sido positiva, pero no basta para resolver las situaciones urgentes; precisamos dar el paso de los vicios a las virtudes, de la corrupción a la ética, del egoísmo a la solidaridad. Se necesita que quien ostente la autoridad, sea del color que sea, esté libre de actitudes como el nepotismo, el tráfico de influencias, la falta de honestidad en la administración de los recursos del pueblo, la parcialidad en la impartición de justicia, la lentitud y negligencia en el servicio a la comunidad».