T-MEC debe garantizar más y mejores empleos: Antonio García
A nombre del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado de la República, el senador michoacano reconoció que los retos laborales continúan
Ciudad de México, 12 de diciembre de 2019.- A más de 25 años de que entrara en vigor el Tratado de Libre Comercio, existe el reto de que el Tratado para México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), brinde a las y los mexicanos la posibilidad de un trabajo estable, digno y bien remunerado, indicó el Senador de la República, Toño García.
A nombre del Grupo Parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD), durante la discusión del protocolo modificatorio, se pronunció porque la celebración de la firma no desvíe del objetivo primordial de dar a las y los ciudadanos, oportunidades de empleo tan buenas, como en Estados Unidos o Canadá.
“Ya que sólo así, la celebración por la ratificación del Tratado será de los mexicanos, no sólo del Poder Ejecutivo y del Congreso”.
Agregó que no se puede negar que, desde hace más de 25 años, vivimos un importante cambio económico que ha impulsado el desarrollo y la calidad de vida de quienes han podido aprovechar los beneficios del libre comercio.
“México pasó de una economía cerrada a un modelo de libre mercado, que implicó en gran medida una profunda transformación de cambios legales, transformaciones institucionales, limitación de las competencias del sector público, modificaciones en la organización de los mercados y la ampliación de la propiedad privada”.
Agregó que a pesar de todos los beneficios económicos de los tratados, aún tenemos una deuda pendiente con nuestros ciudadanos.
“Nuestro país, laboralmente hablando, es más desigual desde la firma del Tratado. Por ello, si bien, la ratificación del T-MEC es una gran noticia pues genera confianza en los inversionistas nacionales e internacionales, no podemos ignorar que los retos laborales continúan”.
Añadió que no se sabe sobre los efectos que a futuro generará estas nuevas responsabilidades, o si las empresas mexicanas tendrán la capacidad para establecer condiciones de trabajo similares a sus homólogos canadienses y estadounidenses.
“Por lo tanto, nuestro reto es, analizar, discutir y rediseñar un nuevo modelo de política económica que fomente el empleo aprovechando las bondades del libre comercio”.
