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Toque de Nano Sabiduría: Demagogia sin verdad

¿Podemos vivir sin la verdad? No es posible para seres inteligentes que actúan en todo con la verdad y gestionan el orden, el mundo como un cosmos. Hay quienes construyen, según ellos, sin la verdad y crean el caos.

Morelia, Michoacán, 28 de noviembre de 2023.- Vista panorámica

¿Podemos vivir sin la verdad? No es posible para seres inteligentes que actúan en todo con la verdad y gestionan el orden, el mundo como un cosmos. Hay quienes construyen, según ellos, sin la verdad y crean el caos.

La demagogia actual del poder es mentira. Las encuestas, al servicio de las demagogias, están al servicio del oficialismo, no de la verdad.

Es demagogia la razón que dan para matar en la guerra. Nada justifica matar a una sola persona, israelíes, palestinos, crimen organizado. 

Los discursos de quienes hacen campañas políticos son una obra maestra de demagogia. Debajo de una secuencia impecable, ante una retórica coherente se esconden afirmaciones, aparentemente verdaderas pero realmente falsas, son un engaño, sofismas.

Los países ricos hablan de negocios y progreso cuando en realidad es saqueo, explotación. 

Es lo mismo que la realidad imaginaria del presidente: la realidad de México es aquella de los “otros datos” de la Mañanera, la que crea Andrés Manuel en sus deseos y en su fantasía. Existe en su imaginación y su voluntad pero no es la realidad dura y desastrosa que enfrentamos los ciudadanos normales.

La verdad es que nadie ha puesto en su lugar muchas decisiones, restableciendo el orden. El dictador está enojado y agresivo por eso. Quiere acabar el orden constitucional y establecer el gobierno que él quiere: una dictadura, no una democracia.

El Poder Judicial ha hecho frente a los caprichos del dictador, está defendiendo la democracia republicana de un dictador enfermo de poder.

La batalla que libra el Poder Judicial es honesta, republicana, justa, contra la dictadura. Tienen todo el derecho a ser apoyados por los mexicanos si quieren un régimen de libertades, derechos humanos, orden, progreso, no de opresión y sangre Estado de derecho, paz.

Por esta razón les quita los fideicomisos, se justifica por razones estúpidas: quiere dar el dinero en las becas…

Se sirve de los legisladores de la mayoría, estos lo obedecen servilmente y tratan de aparentar que tienen razón ante la gente y presentan falacias, argumentaciones que no se sostienen para maquillar su mentira.   

Es increíble la mezquindad, la traición de los legisladores que el pueblo eligió para defenderlo. Se venden y mienten y quieren aparecer como personas inteligentes y honradas ante la sociedad.

Las campañas electorales, que oficialmente se llamaron defensa de la 4T y ahora precampañas no se inscriben en una democracia sino en una farsa demagógica: todo es falsedad que las mayorías pretenden presentar como una gran transformación, conquista democrática, el gobierno único, insuperable. La presentación que hacen es muy bella, pero es sólo fantasía en una retórica demagógica, de engaño. 

La luz de Dios

Los morenistas y su jefe piensan que este gobierno es el anunciado por los profetas y esperado por las naciones. Es el optimismo exagerado de Leibniz en su obra Cándido. “Todo está de lo mejor en el mejor de los mundos”. Voltaire aborda el mismo tema del optimismo a ultranza. Esto no es verdad sólo en la mente fantasiosa de algunas personas.

Es una ideología. No doy un concepto, un modelo de país, es un sueño que se elabora en la mente esquizoide de una persona, no de manera lógica y científica sino soñadora, según los deseos y en las fantasías de una persona que acomoda toda la realidad a su antojo y conveniencia.

Es el país ideal, es la utopía de una persona, no inteligente sino llevada por sus sueños y deseos y obsesión de fama y poder.

Es una concepción maniquea: el mal no existe en el reino. Los crímenes, fracasos que no se pueden negar son obra de los malos de la película, de los enemigos del país. Los del poder le echan la culpa al grupo adversario, neoliberales, sabiondos, los ponen como la reata del puerco . Son la parte negra de la sociedad, a ellos se deben todos los males y fracasos que el reino enfrenta. Parte de esa realidad perversa son también los gobiernos del pasado, por su mala actuación han provocado todo el sufrimiento del mundo.

El jefe se cree un demiurgo, de la esfera de la divinidad, se compara al Mesías. Es una forma de Dios y realiza el mejor gobierno de la historia.

Marean en la misma fantasía a sus seguidores, los tienen cautivos, embrutecidos. No piensan, se dejan manejar como autómatas, fanatizados, a quienes se puede programar desde una computadora.

Llega un momento en que el jefe y el aparato burocrático pierden el control y dejan el razonamiento lógico y asumen actitudes inaceptables en una persona madura e investida de poder. 

Se oscurece el sentido común y se pierde una actuación razonable. Para imponer su capricho se descalifica, visceralmente, neciamente, a quienes no se someten incondicionalmente, a quienes prefieren la inteligencia a la lealtad, a la obediencia ciega.

Se derriba la democracia, la división de poderes: la mayoría oficialista está sumisa, no debate, más bien embate y sólo sigue la línea del ejecutivo. Están cometiendo contra la patria un delito de lesa majestad, bombardeando la democracia. anulando la separación de poderes

La misma investidura presidencial pierde su control, coherencia y dignidad.

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